Es el domingo del Super Bowl y lo que necesitas son alitas de pollo. Tus amigos te han estado pidiendo insistentemente que organices una de tus legendarias fiestas del Super Bowl, y finalmente ha llegado el día.
Una hora antes de que comience el juego, intentas llamar a todos los locales de alitas de la ciudad, pero, lamentablemente, todas las líneas están ocupadas.
Por pura frustración, comienzas a preguntarte por qué las alitas de pollo son tan populares durante el Super Bowl.
De todos los días, tiene que ser este día cuando los lugares de las alas están repletos de pedidos, desde la mañana hasta la noche.
Las alitas de pollo son esenciales para el super bowl
¿Las alitas de pollo se consideraban sobras?
Hay varios relatos de cómo las alitas de pollo se convirtieron en un alimento tradicional querido, pero la siguiente historia es la que se cuenta con más frecuencia.
Sus humildes comienzos comenzaron en Buffalo, Nueva York, en un pequeño restaurant.
Los propietarios Frank y Teressa Bellissimo, quienes fundaron el bar en 1939, describen la creación como un accidente que se volvió tendencia.
En lugar de entregar cuellos y espaldas de pollo, que usaban para hacer su salsa de espagueti, los proveedores del bar entregaron por error alitas de pollo.
Dom Bellissimo, hijo de los propietarios, tenía una versión un poco diferente de cómo surgió el ala. Según Dom, un viernes por la noche de 1964 le pidió a su madre que preparara un plato para los clientes habituales que habían estado gastando mucho dinero.
También había un caballero llamado John Young, quien afirmó haber creado primero el ala de pollo Buffalo.
Algunos han argumentado que su brebaje no se considera un ala de pollo “regular” porque la sirvió completa, sin dividir toda el ala en tambores y pisos, pero no entremos en este debate infructuoso.
Alitas de pollo hoy en día
Sea cual sea la historia en la que creas, los pequeños detalles no importan. Lo más importante a tener en cuenta es que las alitas y boneless con la salsa búfalo, como las conocemos ahora, se hicieron muy populares y que nunca deben faltar.
Aunque no hay un relato exacto de cómo las alitas de pollo se convirtieron en un elemento esencial del Super Bowl, era evidente que las alitas no solo llegaron para quedarse, sino para conquistar.
Suponemos que debido a que las alitas eran tan populares en los bares primero, donde la gente podía comer mientras veía deportes, las compañías de alimentos comenzaron a darse cuenta y crearon su propia versión de las alitas de pollo Buffalo.
Las alitas de pollo comenzaron como chatarra, pero gracias a la familia Bellissimo e incluso a John Young, quienes podrían compararse con el futuro entrenador en jefe del Salón de la Fama del super bowl, Bill Belichick, le dieron a las alitas de pollo la oportunidad de demostrar su valor.